
Además de presentar la investigación que, según dicen, también desaprueban algunos de sus críticos, los científicos informaron que otros meteoritos marcianos parecen alojar fósiles microbianos distintos e identificables que apuntan aún más fuertemente a la existencia de vida.
“Nos sentimos más confiados que nunca de que Marte alguna vez fue, probablemente, y quizá todavía lo es, hogar de la vida”, dijo el jefe del equipo, David McKay en una conferencia patrocinada por la NASA sobre astrobiología.
McKay citó años de trabajo de los miembros del equipo Kathie Thomas-Keprta y Simon Clemett que, dijo, refutan la crítica central sobre la importancia del meteorito. También señaló la presencia de lo que parecen ser microbios fosilizados en otros meteoritos marcianos, y también el flujo constante de descubrimientos de otras personas que apuntan a un Marte que en un momento pudo haber albergado vida: húmedo, cálido y envuelto en una atmósfera potencialmente protectora y un campo magnético.
Los críticos dijeron que es igual de fácil que existan las magnetitas sin las bacterias o la biología, ya que a veces se forman como resultado del choque y el calor abrasador que podría venir, por ejemplo, del impacto de un asteroide. Pero en el trabajo reciente, Thomas-Keprta, una experta en el uso de la tecnología de haz de electrones para obsevar el interior de las rocas, informó de que la pureza de las magnetitas hace imposible esa explicación.
McKay se quejó de que no se había prestado suficiente atención a los trabajos como el de Thomas-Keprta.
“Todas las críticas a nuestro artículo original tienen una amplia difusión, pero cuando hicimos el trabajo para probar que los críticos estaban equivocados, apenas se reflejó”, dijo en una entrevista en la conferencia. “Ahora estamos en condiciones de decir que hemos derribado todas las críticas, y que nuestra explicación biológica se mantiene en pie.”

Imagen obtenida con un Microscopio Estereoscópico de los depositos de carbonatos presentes sobre la pared de la fisura dentro del ALH84001
A pesar de que los científicos discuten las afirmaciones de McKay, el campo se ha vuelto cada vez más optimista sobre la posibilidad de encontrar restos (o tal vez incluso muestras) de vida microbiana en Marte. Decenas de documentos presentados durante la conferencia opinan que el planeta ahora seco y frío, una vez fue cálido, húmedo y aparentemente muy habitable.
En el año 1996, en una declaración televisada por el presidente Bill Clinton se anuncio dicho descubrimiento generando gran excitación entre la comunidad científica de entonces, dando lugar a la formación de una comisión para examinar las implicaciones y el nacimiento de un programa de Astrobiología de la NASA.
Catorce años de crítica implacable han puesto a muchos científicos en contra de los resultados de McKay, y el “descubrimiento” en el meteorito de Marte ha seguido siendo un tema no resuelto. Esto ha continuado a pesar de que las conclusiones centrales del equipo —que Marte tuvo alguna vez los seres vivos— ha ganado una amplia aceptación entre los biólogos, químicos, geólogos, astrónomos y otros científicos que integran la comunidad astrobiología.
EXTRA:
Fuente: http://www.quantum-rd.com/2010/05/meteorito-alh84001-muestra-evidencia-de.html